La primera relación es contigo mismo

La percepción que tenemos del mundo, de lo que es bueno o es malo, de lo que creo que debo hacer o ser, de lo que hago para agradar al otro, todo eso, se origina en la relación que tengo conmigo mismo.

Esta relación cambia con el tiempo. Comienza desde muy pequeños, cuando somos niños y nuestros padres o quienes hacen el papel de padres en nuestras vidas, nos transmiten ese amor instintivo que como seres humanos tenemos ante un indefenso bebé. Poco a poco, vamos explorando el mundo y recibiendo información de quienes nos rodean, recibimos amor pero también miedos, creencias, frustraciones. Ya cuando somos adultos, las creencias y valores que hemos recibido y que hemos aprendido, forman nuestro carácter, la base desde donde vamos a tomar las decisiones en nuestra vida. Algunas de ellas nos traerán felicidad, otras no tanto.  Pero todas las situaciones sin excepción, parten de la relación que tengo conmigo mismo. El autoconcepto.

El autoconcepto y relación con nosotros, tiene dos caras, una aceptada socialmente y la otra oculta, que quizás ni nosotros la vemos conscientemente.  La social, es esa que mostramos orgullosos, nuestra parte divertida, nuestra parte culta, nuestra parte fuerte y valiente, quizás esa que muestra sacrificio para que otro sea feliz, aunque en el fondo nos cause dolor. La otra parte, quizás no es tan divertida, es esa que escondemos, esa en la que nos sentimos vulnerables, débiles, abandonados, tristes e incluso solos.

Todo ello, en una sola vasija: Tú. Cómo es que todo eso entra dentro de una sola persona? Todo lo que parece opuesto.

Pues, desde mi perspectiva, todo eso es simplemente perfecto, somos espíritu teniendo esta experiencia humana, y lo más extraordinario que disponemos es: El Poder de Elegir! Puedo elegir cambiar, puedo elegir amarme, puedo elegir ponerme primero a mi antes que los demás, puedo elegir decir No! o Sí! Puedo atreverme a dar ese paso, a probar cosas nuevas, aunque después quizás no salga del todo bien. Lo importante es amarnos, y tratar de armonizar esos dos aspectos en nuestro interior. Atesora cada momento que te trae la vida, y procura ver eso positivo que te trae, y si no lo ves, pues nada malo pasa, simplemente observa.

Perdonate por las cosas que hiciste y que quizás ahora lo harías de otra manera, pues lo que pasó fue perfecto tal como pasó.

Y ahora, amate! y que mejor forma de amarse a si mismo que ser COHERENTE CON LO QUE SIENTES!!! Si quieres ir a ese lugar anda! y no quieres, no vayas! si quieres hablar con esa persona hazlo! y si no deseas, ni la busques. Presta siempre atención a cómo te sientes, pues tu cuerpo y tus emociones siempre te guiaran hacia el mejor camino para ti.

Dilcia Martínez.
Si deseas que te acompañe en tu camino de transformación personal, usando la Ley De Atracción o Bioneuroemoción, contactame a través de mi pagina de facebook:

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